A lo largo de la historia, el hombre tiene la necesidad de curar sus enfermedades. Aquí nace, en oriente, la Medicina Tradicional China (MTC). Como una agrupación de distintas técnicas terapéuticos (Acupuntura, Aurículoterapia, Tuina, Fitoterapia, Qi Gong...) la Medicina China nace, evoluciona y se desarrolla a lo largo de aproximadamente 5.000 años, bajo la cultura china. Como una Medicina propiamente dicha, comprende una concepción particular del cuerpo humano y de todos sus procesos así como de los factores que rodean al ser humano. Influenciada por la filosofía Taoista en gran medida, la MTC concibe el flujo energético (reacciones químicas y procesos fisiológicos) que recorre todo el cuerpo (Qi) por unos canales llamados Meridianos, los cuales estan compuestos de los famosos Puntos de Acupuntura. La MTC tiene sus própios métodos de diagnóstico, basados en la observación y el conocimiento a través experiencia clínica milenaria, como son la pulsología o la observación de la lengua, entre muchos otros. La Farmacopea china (el uso de materias vegetales, minerales y animales con fines terapéuticos) juega un papel importante en el tratamiento de MTC, pues su estudio a lo largo de la historia en esta ciencia, es ampliamente extenso.

 

Considerada una de las más antiguas Ciencias Médicas, y reconocida por la OMS, sus efectos están científicamente demostrados, la avalan millones de pacientes en el Mundo y cientos de estudios médicos. Sus métodos terapéuticos no entran en conflicto con la Medicina Convencional, siendo ambas, en ocasiones, el complemento ideal para tratar muchas patologias.